viernes, 22 de febrero de 2008

Ella Fitzgerald o la gran dama del jazz


Aquí tenéis una nueva colaboración de Sergio Gadea sobre jazz.


Nacida en 1918 en Newport News, Virginia.En edad escolar mostró inteligencia e interés sobre todo en las clases de latín, pero también en otras asignaturas hasta que, poco a poco, sus amigos fueron tentándola y Ella dejó de ir a clase. Ya de adolescente comenzó a bailar en las calles a cambio de míseras propinas, tras una estancia en un reformatorio para negros, de la que nunca quiso hablar.

Por casualidad un día, en un casting, alguien le pidió que hiciera algo que no fuera bailar. Ella se sobrecogió, no sabía qué hacer, aunque de pronto pensó: "Cantaré aquella canción..." Y así inició su larga carrera como cantante, no sin ciertas vicisitudes al principio, pero quizá la más grande de la música popular negra , con el permiso de su amiga Billie Holiday o también de la gran Sarah Vaughan.

Empezó a triunfar de adolescente,mas su carrera realmente se inauguró con la mayoría de edad.Pronto fue número uno de todas las listas de swing y jazz. Ella era el patito feo que al cantar se transformaba en cisne .

Tras el éxito de A tiscket, a tasket, a green and yellow basket y ya habiéndose "buscado la vida" en Nueva York, consiguió grabar con la prestigiosa orquesta de Chick Webb, al que pronto sucedió en la dirección de la misma, al padecer éste una afección tuberculosa que le robó la vida.
Todo esto la catapultó a un éxito todavía más fulgurante. Ella era una superdotada, una virtuosa de la voz, tenía un registro de tres octavas y media (Billie sólo cantaba una) y era capaz de cantar en cualquier tonalidad o de imitar fraseos exactos de saxo alto o piano.

Más tarde, tras fracasos matrimoniales, nuestra amada vocalista, conoció al ilustre Dizzy Gillespie, que venía de tocar con Charlie Parker, y quien enseñó a la diva lo que era el be bop.

La Fitzgerald era fantástica, estelar; grababa con grandes orquestas, con Sinatra, retomaba su amor por Louis Amstrong y lucía ampulosamente todos los registros de su "scat"(improvisación, fraseo vocal, tarareo).

Algunas décadas más tarde, tras infinitos éxitos, la acechó un problema de salud: Era diabética y fue perdiendo la vista paulatinamente, la gangrena hizo que le amputaran las dos piernas... El faro marítimo del jazz vocal se iba convirtiendo en una linterna que consumía sus baterías. La Dama del jazz falleció en el silencio de alguna noche de 1996. En cuanto a su discografía decir que no tiene desperdicio y sólo destacar Cole Porter Songbook y todas la grabaciones que hizo de temas del ilustre George Gershswin o de Irving Berlin.

Sergio Gadea
Angel eyes en Amsterdam , año 1957

3 comentarios:

J.M.Martinez dijo...

Yo soy más fan de la fragilidad de Billie Holiday. Ella Fitzgerald es una grande, pero no me emociona.

Sourin dijo...

Es muy buena......creo que en la peli de V de Vendetta aparece una cancion suya......la de......Cry me a river.......

Magnifica....

un abrazo

Sourin

Jaime Sirvent dijo...

Semi, a mí me gustan las dos, pero quizás la voz de Holiday sea más emotiva y la de Fitzgerald más técnica.

Sourin, otro abrazo.