Booster Gold, entretenimiento y diversión por arrobas

Hacía tiempo que quería hincarle el diente a esta nueva serie de Booster Gold, sobre todo al estar metido en ella uno de mis guionistas favoritos del panorama actual del cómic americano, Geoff Johns, y también por tratarse de un personaje de bajo perfil como Booster Gold, totalmente alejado de los grandes focos de atención y con unas ventas más modestas, algo que suele dar a los autores más libertad de la habitual para experimentar y salirse de los cauces usuales, como bien pudimos ver con Robert Kirkman y su trabajo en Marvel con el Hombre Hormiga, serie de bajo nivel de ventas(de hecho fue cancelada), pero que se reveló como una agradable y fresca sorpresa; y he tenido la oportunidad de leerla, al fin, gracias a Osukaru, quien me vendió los tres primeros números a precio de amigo..., bueno más que de amigo, de amiguísimo, y al que le vuelvo a dar las gracias desde aquí.

Booster Gold me ha parecido una serie fresca, divertida, entretenida a rabiar y con numerosos guiños a la continuidad de DC que harán las delicias de los fans más acérrimos, pero que al mismo tiempo también se puede disfrutar sin ser un experto en la continuidad deceíta. Para aquéllos que no conozcan al personaje, éste fue creado por Dan Jurgens a finales de los años 80, se trataba de un jugador de fútbol americano del siglo XXV que se vio envuelto en un escándalo de venta de partidos, y que robó un anillo de vuelo de la Legión de Superhéroes , el cinturón con el campo de fuerza de Brainiac 5, y una máquina del tiempo con la que viajó al siglo XX para convertirse en un superhéroe y forrarse con ello gracias al merchandising y los patrocinios. El personaje gozó de una serie regular en la época con guión y dibujo de Dan Jurgens, que fue cancelada por malas ventas, y también llegó a formar parte de la Liga de la Justicia en la mítica etapa de Keith Giffen y J.M.De Matteis.

La premisa de la serie actual que cuenta con guión de Geoff Johns y Jeff Katz, y dibujos de Dan Jurgens(creador del personaje), es la de un Booster Gold que actúa como policía del tiempo junto a su inseperable droide Skeets y a Rip Hunter, personaje de culto de DC dedicado a salvaguardar las diversas líneas temporales. En ese sentido la serie es un continuo ir y venir por el túnel del tiempo, total y absolutamente vertiginoso, recorriendo de esa forma momentos míticos del pasado de los personajes DC, o futuros alternativos, todo vale para conseguir una serie dinámica, fresca, divertida en la que el lector no tiene la sensación de que le estén tomando el pelo. En definitiva, una serie que se ha ganado el derecho a ser seguida a partir de ya.