sábado, 25 de abril de 2009

Detective Marciano: secretos americanos de Gerard Jones y Eduardo Barreto


El Detective Marciano irrumpió en escena a mediados de los años 50 y fue el primer nuevo héroe presentado por DC después de muchísimo tiempo , en una época en la que los superhéroes se encontraban en un marcado período de decadencia , y en la que únicamente sobrevivían Superman, Batman y Wonder Woman dentro de un mercado editorial muy dañado por la Caza de brujas del Senador McCarthy. En estos orígenes las aventuras del Detective Marciano aparecían como complemento en Detective Comics(una de las míticas cabeceras de Batman), y en ellas se ocultaba bajo la identidad civil de John Jones, agente de policía que resolvía sus casos valiéndose de sus poderes en unas aventuras que estaban a caballo de lo policíaco y la ciencia ficción.


Gerard Jones y Eduardo Barreto publicaron esta miniserie en 1992 en los USA, y que permanecía inédita en España hasta hace unos meses . La obra se encuentra ambientada precisamente en el período inicial de la trayectoria del Detective Marciano, los años 50, una época convulsa para América en la que las libertades públicas se encontraban muy dañadas por la Caza de brujas, y en la que la libertad de expresión se vio gravemente lisiada en favor de un pensamiento reduccionista y obtuso que excluía todo lo que no fuera "normal" y convencional , y que se saliera fuera del presunto cuento de hadas del American way of life, y que se veía representado por concursos bobos y amañados, programas televisivos de cartón-piedra y por una histeria propagada por los medios de comunicación en los que se vendía el terror de la amenaza roja que podría aparecer en cualquier esquina.

La ciencia ficción cinematográfica de los años 50 reflejó bastante bien esta histeria ante las amenazas venidas de fuera y que podían infiltrarse y devorar desde dentro el cuento de hadas de las casitas con jardín, las tartas de manzana y el pavo del día de Acción de Gracias con títulos como El enigma de otro mundo, Los invasores de Marte, La guerra de los mundos o en especial esa indiscutible obra maestra de la historia del cine que es La invasión de los ladrones de cuerpos en la que, como todos los lectores de este blog sabéis, se contaba la historia de una invasión en la que unas plantas alienígenas reemplazaban a los seres humanos por réplicas exactas pero totalmente desprovistas de alma. Así, si en la película de Don Siegel había unos alienígenas que nos colonizaban valiéndose de la vía vegetal, en el cómic de Gerard Jones y Eduardo Barreto unos misteriosos seres han implantado unas semillas en los organismos humanos que les hacen arder en cuanto se salen del comportamiento considerado como estándar o en cuanto alguno de los que realmente conocen la naturaleza de la invasión intentan revelarla al mundo. Es por ese motivo que aparecen numerosas pistas de forma codificada y discontinua en forma de cómics, poesía..., en definitiva en las formas culturales más marginales y alejadas del circuito mainstream(¿acaso no ocurre así en nuestro mundo real?) en las que nuestro héroe encontrará las pistas necesarias para desentrañar este misterio y tratar de resolver este caso.



Detective Marciano: secretos americanos es una crítica feroz contra la homogeneización del pensamiento y de los gustos, y contra la alienación proviniente de los medios de comunicación. En ese sentido los diálogos del cómic esconden muchas perlas del tipo"¿Por qué alcanzan tanto poder estas cosas? trivializar el conocimiento. Reducir su mundo a fragmentos de información" o "nuestros miedos son falsos, los han creado la gente a la que tememos para que no temamos lo que de verdad deberíamos temer" o "mentiras, las mentiras que tan solo un gobierno intentaría colarnos" o " los concursos reducen la verdad a pedazos de entretenimiento , ¡les enseñamos a memorizar en vez de a pensar!". También destaca la aparición de Fidel Castro en plena revolución para derrocar al gobierno de Batista, y sobre todo el diálogo que se establece entre el Detective Marciano y la estrella de rock que le acompaña: " Esta gente, ¿no son comunistas , verdad Detective Jones?", "comunistas, ¿y que son? seres que viven para el grupo... y no para sí mismos, ¿es comunista ese guerrero que juega al Béisbol y que se hace llamar "Salvador" a sí mismo?... en este mundo no hay comunistas, en el mío sí los había y están todos muertos".



El guión de Gerard Jones es bastante notable y conduce la historia a caballo entre el género policíaco y la ciencia ficción de manera eficaz sin que nada chirríe, dando como resultado una historia que consigue entretener al mismo tiempo que suscita la reflexión en el lector, y que es una muestra fidedigna del aire de histeria que se respiraba en aquellos años aparte de contener muchas líneas de reflexión que siguen vigentes en nuestra sociedad moderna, porque al fin y al cabo tampoco hemos cambiado tanto. Merece también una especial mención el excelente y efectivo dibujo de Eduardo Barreto, que consigue reproducir fielmente la estética de esos años, a la vez que demuestra ser poseedor de una buena capacidad narrativa como demuestra , por poner un ejemplo la excelente planificación de las persecuciones o la página muda dispuesta en paneles horizontales y alargados en los que vemos la llegada de nuestros protagonistas a Leavitzville.

En resumen, un buen tebeo que gustará tanto a los seguidores del género de superhéroes, como a los aficionados al policíaco o a la ciencia ficción , y que deparará agradables sorpresas a todos aquellos lectores que desconozcan al personaje.

Detective Marciano: secretos americanos
Gerard Jones(guión), Eduardo Barreto(dibujo)
Formato: tomo de tapa blanda
Editorial: Planeta DeAgostini
Páginas:144
Precio: 11,95€

6 comentarios:

WODEHOUSE dijo...

La señora de la batidora, si me permites te la voy a robar con tu permiso, me ha encantado lo de las 5 velocidades y tan contenta ella...que tecnología punta. Y aquí íbamos en burro en esos años. :(

Jaime Sirvent dijo...

Pues nada, robo concedido:)

Mo Sweat dijo...

Saludos, Jaime.

Interesante cómic, si señor, del cual yo también destacaría a Barreto, un artista que siempre me ha gustado mucho y del cual opino que es de los más infravalorados que ha habido. Mucha calidad y posiblemente poca suerte.
Lo comparo a Lee Weeks, que es de los mejores dibujantes que ha habido en Marvel durante bastantes años, pero nunca ha sido suficientemente reconocido.

Plissken dijo...

Coincido en la reivindicación de Barreto y señalo a Gerard Jones como un guionista más que competente que tampoco ha tenido excesiva suerte. Cuando pienso que gente como él o Chuck Dixon están medio desaparecidos en detrimento de gente como Brian Michael Bendis se me ponen los pelos como escarpias. La ambientación en la america paranoide y esquizofrénica de los cincuenta es un verdadero acierto, y la aparición de Fidel un puntazo realmente espectacular.

Jaime Sirvent dijo...

Mo, pues sí, tienes toda la razón, Barreto realiza un gran trabajo en esta miniserie y da muestras de ser un muy buen narrador. Tengo pendiente todavía su etapa en Nuevos Titanes y su Lex Luthor: biografía no autorizada.

Tienes razón, no es un dibujante al que se le haya publicitado mucho desde las grandes editoriales, quizás sea por poseer un estilo que gusta al escaso número de lectores de buen gusto, pero que no tiene nada que ver con los dibujantes hot del momento que tanto gustan al gran público.

Jaime Sirvent dijo...

Plissken, ya sabemos que la sombra de Georgie Dann es muy alargada, pero confiemos en volver a ver a Gerard Jones en otros proyectos, su calidad lo merece.